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jueves, 3 de noviembre de 2016

TURÓ DE LES CLIVELLERES

A mediados de noviembre se suele celebrar en Sant Quintí de Mediona el Mata-Degolla, que recrea la destrucción de la villa por las tropas borbónicas durante la Guerra de Sucesión. Si queremos acercarnos a pasar el día por la zona, podemos además hacer una pequeña excursión al Turó de les Clivelleres desde el que se tiene una amplia vista sobre el Penedès. Como Sant Quintí suele estar tomado por los turistas ese día, es más tranquilo hacer la excursión desde el vecino Sant Joan de Mediona.

Ficha técnica:
Altitud: 744 m.
Excursión fácil.
Ascensión por pista.
Desnivel: 315 m.
Distancia: 3,7 km (ida).
Duración: 1h 30min aproximadamente (ida).
Recomendada para niños mayores de 4 años.
Cartografía: No disponemos de cartografía de esta zona. Nosotros descargamos e imprimimos un mapa de la web del ICC (ver enlace en pestaña lateral).


Aproximación en coches:
Barcelona - Sant Sadurní d’Anoia (por AP-7) - Sant Pere de Riudebitlles (por BP-2151) - Sant Quintí de Mediona (por BP-2151 y C-244) - Sant Joan de Mediona (por C-244 y BV-2136). Trayecto de 1h aproximadamente.
Aunque se puede hacer la excursión desde el pueblo, para acortarla un poco nosotros la iniciamos en el cementerio de Sant Joan de Mediona. Para llegar allí, al salir de Sant Joan por la BV-1236 llegaremos a una rotonda en la que hemos de seguir las indicaciones hacia Les Cases Noves de Cal Pardo. Al cabo de unos 800 metros veremos a mano izquierda el cementerio al que se accede por un desvío no señalizado en una curva de poca visibilidad (¡Atención!). Junto al cementerio hay una gran explanada donde se puede aparcar

Itinerario:
Desde el cementerio (457 m) caminamos por una pista que desciende junto a una instalación de placas fotovoltaicas hasta la riera del Torrent de Puigcogul (431 m, 4min). Aquí encontraremos un poste indicador y las marcas del PR C-155 que nos acompañaran en buena parte de la excursión. Cruzamos el lecho del torrente y continuamos por la pista que asciende hacia el S, con algún tramo de pendiente moderada hasta llegar a la bifurcación de Can Ternet (491 m, 20min).
Aquí se puede seguir por cualquiera de las 2 pistas, que acabarán confluyendo más arriba, pero es más cómodo continuar recto por la pista de la izquierda. Unos 400 metros más adelante llegaremos al cruce del Corral del Marquès, señalizado con un poste indicador (510 m, 30min).
Dejamos la pista principal y continuamos por la de la derecha, siguiendo el PR, que finalmente se convertirá en un camino ancho y evidente que sube por el bosque hasta un gran cruce de pistas, la Obaga de la Muntanya del Marquès (654 m, 55min).
Seguimos recto hacia arriba y unos 100 metros más adelante enlazamos con otra pista. Éste es el punto clave de la excursión, pues aunque todas las marcas y los postes indicadores se dirigen hacia la derecha (SW), nosotros hemos de seguir por la pista de la izquierda, sin ninguna indicación. Ignoramos más adelante un desvío a la izquierda y nos mantenemos en todo momento en la pista principal. Saldremos finalmente a terreno despejado donde la pista da un giro de 180 °C hacia la derecha y comienza a descender, junto a un bonito pesebre (740 m, 1h 20min). Lo mejor es dar por terminada aquí la excursión pues es el lugar que mejores vistas ofrece.
Sin embargo, si nos corroen las ganas de alcanzar a toda costa el vértice geodésico de la montaña hemos de continuar hacia el E por un camino que nace en la curva. Al cabo de unos 150 metros veremos un pequeño hito a mano derecha que señala el inicio del tenue senderito que se interna entre la vegetación arbustiva y espinosa para llevarnos, llenos de arañazos y rascadas, hasta el vértice del Turo de les Clivelleres (744 m, 1h 30min), sin ninguna vista.

 El Turó de les Clivelleres desde Sant Quintí de Mediona

 Pesebre

 Final de la excursión

 Vértice geodésico

Montserrat entre los arbustos